Los autónomos estamos obligados a controlar bien las finanzas, sobre todo las del día a día y como la práctica hace al maestro, acabamos por controlar bien los pagos y los cobros.
Pero para que tu negocio vaya redondo, necesitas algo más. Si quieres que tus cuentas estén saneadas y tener bastante dinero para irte de vacaciones con la familia, tienes que convertirte en un buen financiero.
Está claro que los trabajadores por cuenta propia tenemos que lidiar con la incertidumbre. Eso pasa porque:
- No sabemos cuánto vamos a cobrar un mes
- No sabemos el número de clientes nuevos que podemos captar
- No sabemos cuánto vamos a pagar en impuestos, etc. Nos pasamos la vida mirando a final de mes, intentando adivinar qué tal nos van a salir las cosas.
Y esto se debe sobre todo a que no nos planificamos bien y a que no seguimos una serie de normas básicas que nos pueden hacer la vida más fácil.
En este artículo, voy a darte algunos trucos financieros que yo llevo 15 años aplicando en mis empresas. Apunta:
En este artículo hablaré de:

