¿Eres propietario y te planteas alquilar tu local? 👀
Hay veces en que crece tanto el negocio que se hace necesario un espacio más grande.
Y ahora… te conviertes en el inquilino de otro local, porque claro, lo necesitarás para seguir con el negocio en crecimiento.
En estos escenarios aparece la figura del arrendador y el arrendatario, pero no siempre queda claro cuál es cada uno.
En este artículo vamos a arrojar luz sobre quién es quién y qué obligaciones tiene cada perfil para que no vuelvas a tener dudas cuando te enfrentes a un contrato de alquiler 👇
Quién es el arrendador
El arrendador es el propietario del inmueble. Así queda más claro, ¿verdad?
Es esa persona que cede su piso, casa, local, garaje… para que mediante un contrato, un arrendatario pueda disfrutar del bien.
En este contrato de cesión del bien se especifican las garantías para evitar riesgos y se dejan claras y por escrito todas las condiciones del alquiler.
Si el inquilino no paga las cuotas o incumple las cláusulas del contrato, está estipulado por ley que el arrendador puede desalojar al arrendatario o cancelar el contrato.
El arrendador tiene una serie de obligaciones que cumplir. Vamos a verlas.
Obligaciones del arrendador
Hay 5 obligaciones, en concreto, que el propietario debe cumplir al alquilar un inmueble a otra persona:
Pagar los impuestos y tasas
Las facturas de los suministros pueden ir a cargo del arrendatario (en la mayoría de los casos) pero también pueden ir a cargo del arrendador.
Son los impuestos y tasas municipales los que siempre tendrá que pagar el arrendador como dueño de la vivienda.
Entre estos impuestos y tasas a los que debe hacer frente el propietario, está la presentación del modelo 115 y el modelo 180 que graban los alquileres, el IBI, las tasas de basura, el seguro de vivienda y el ITP (impuesto sobre transmisiones patrimoniales).
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Devolución de la fianza
Al comenzar el periodo de alquiler, el inquilino paga una fianza al propietario para hacer frente a los desperfectos que se puedan ocasionar durante su estancia en el inmueble.
Por ejemplo, imagina que el gato del inquilino ha arañado los muebles de madera del salón. Pues el propietario está en su derecho de arreglar estos muebles con el dinero de la fianza.
Para ello, una vez que el contrato de alquiler ha finalizado, el arrendador supervisa el inmueble para ver en qué condiciones ha quedado y comprueba que no han quedado deudas con las compañías de suministros.
En el caso de que todo haya ido bien y no haya desperfectos, el arrendador solicitará a la entidad bancaria el ingreso de la cantidad total de la fianza al inquilino.
Un mes más tarde (como mucho) el arrendatario devolverá las llaves al arrendador.
Si por algún motivo, el inquilino tarda en devolver las llaves, el propietario está en su derecho de pedir intereses por la demora.
Exigir el pago de la mensualidad
El arrendador debe transferir el bien y exigir el pago de la mensualidad que se habrá pactado en el contrato y el inquilino debe pagarlo dentro plazo acordado.
Normalmente, en los contratos de alquiler se especifica el día de entrada del arrendatario a la propiedad y el procedimiento de pago que se llevará a cabo mensualmente.
Por lo que no suele haber dudas al respecto.
Conservar el bien en buenas condiciones
Esta es una de las obligaciones más importantes por parte del arrendador.
Entre las responsabilidades del propietario está hacerse cargo de todas las reparaciones necesarias para mantener la vivienda con unas condiciones de habitabilidad.
Por lo que si hay una fuga, un electrodoméstico está roto o se funde una bombilla, es el propietario quien debe hacerse cargo.
Ceder el contrato a otra persona a petición del arrendatario
Este es uno de los puntos que no todo el mundo conoce.
Si la vivienda está inscrita en el Registro de la Propiedad, el inquilino puede seguir con el alquiler, aunque no use la vivienda.
En ese caso, el arrendador cede el contrato a otra persona para que viva en esa casa mientras no está el arrendatario.
Pero cuidado, porque solo pueden entrar a vivir en el inmueble con el mismo contrato (o hacer uso de él) sus hijos dependientes, una pareja de hecho o un cónyuge legal.
Quién es el arrendatario
El arrendatario es la otra parte de la moneda, es decir, el inquilino: la persona que ocupa la propiedad de alquiler cedida por el propietario.
Como hemos comentado antes, la cesión se hace con un contrato de arrendamiento firmado por las dos partes involucradas, por lo que el arrendatario también tiene que aceptar las condiciones del propietario y firmarlas para dejar constancia de que es conocedor.
Obligaciones del arrendatario
El arrendatario por su parte, también tiene una serie de obligaciones que tiene que cumplir por ley.
Abonar la fianza y pagar la mensualidad
El arrendatario deberá abonar una fianza que se usará para cubrir los posibles desperfectos de la vivienda (si los hubiera).
Si el inquilino decide marcharse antes del fin del contrato, si hay desperfectos en el inmueble o deja de pagar el alquiler, el arrendador tiene el derecho de quedarse con esa fianza.
Además, el arrendatario tiene la obligación de pagar la mensualidad en el plazo fijado en el contrato. En caso contrario, el arrendador puede finalizar el contrato y quedarse a cargo de su inmueble.
Pagar los gastos de los suministros
Por norma general, el arrendatario se hará cargo de los gastos de suministros como el agua, la luz o, si lo hubiera, el gas.
Son gastos que provienen del uso que hace el propio inquilino en su día a día, es por eso que corren a su cargo.
Pero, como venimos diciendo, lo que se firma en el contrato es lo que cuenta y si se ha decidido con el arrendador que es él quien se hace cargo, se hará así.
Entregar la vivienda en buenas condiciones
Una vez finalizado el contrato, el arrendatario debe dejar el inmueble tal y como estaba cuando entró a vivir en él.
De no ser así, podría perder la fianza abonada al principio del arrendamiento porque, como hemos comentado, se utiliza para cubrir los desperfectos.
Lo mejor antes de dejar la casa es revisar que todo esté en orden.
Dejar el inmueble si el arrendador lo necesita
Sí, puede parecer un poco injusto, pero al final el arrendador es el propietario del inmueble y tiene legitimidad para usarlo si lo necesita.
Pero aclaremos cuándo.
Solo puede hacer uso de la vivienda si ha pasado el primer año del arrendamiento y comunica al arrendatario con 2 meses de antelación que necesita el inmueble alquilado como vivienda.
Una vez el inquilino ha salido, si el arrendador o alguno de sus familiares no hacen uso del inmueble en los siguientes 3 meses, el arrendatario puede volver a ese inmueble en un plazo de 30 días, manteniendo el contrato.
Diferencias entre arrendador y arrendatario
Entonces, así a modo de resumen, ¿cuál es la diferencia entre arrendador y arrendatario?
Pues el arrendador es el propietario del inmueble y el que lo cede a otra persona mediante un contrato que firman las dos partes. Este tiene una serie de obligaciones que debe cumplir.
Por otro lado está el arrendatario, que es el inquilino y el que hace uso del inmueble del propietario y que, al igual que el arrendador, tiene unas obligaciones que cumplir.