Financiación para autónomos: 9 claves antes de solicitarla (y 5 consejos útiles)

¿Qué posibilidades de financiación tienes como autónomo, cuando la inflación sigue protagonizando las noticias y los bancos no se animan a prestar dinero fácilmente? 

No queremos desanimarte. Pero tampoco engañarte: estos son los tiempos que nos han tocado vivir… 

Pero como enseñaba Aristóteles en su Ética a Nicómaco, elegimos según las circunstancias, no las circunstancias mismas. 

En plena tempestad, el capitán de un barco mercante puede elegir arrojar la carga para salvar a su tripulación, pero no puede elegir que llegue la calma y no haya tempestad.

En lo que sigue, te daremos las claves para que puedas jugar tus mejores cartas, con o sin tempestad 💡

1) Créditos y préstamos: las principales formas de financiación para autónomos (pero no las únicas)

La mayoría de bancos de nuestro país ofrecen líneas de crédito o préstamos para autónomos y emprendedores. 

Los créditos y préstamos son formas de financiación diferentes

  • Un crédito es un dinero que el banco te presta en función de tu necesidad. Por ejemplo, una línea de crédito de 10.000 €. En lugar de recibir ese dinero de una vez, vas disponiendo de cantidades inferiores hasta que se agote o venza. 
  • Un préstamo es un dinero que recibes de golpe desde el inicio. 

En ambas formas de financiación, se dan las mismas características: tienes que devolverlos con intereses y comisiones en unos plazos acordados con el banco. 

También difieren en otros aspectos que más tarde te aclaramos.

Hay más vida y vías de financiación más allá de los préstamos y créditos. Pero de estas te hablamos mejor más adelante. 

Ahora sigamos con los más populares. 

2) Las otras 3 características de los créditos para autónomos 

Pues lo dicho, los créditos para autónomos son un capital que recibes en cantidades inferiores para suplir necesidades puntuales. 

Por ejemplo, el pago a proveedores.  

Pero tiene otras 3 características, según el Banco de España:

  • Puedes devolverlos total o parcialmente antes de su vencimiento
  • Suelen usar como soporte una cuenta corriente (de ahí la expresión “contrato de crédito en cuenta corriente”). En esa cuenta se anota lo que dispones y los reintegros. 
  • Los bancos suelen exigir garantías personales y avales (con algunas excepciones)

Hay diferentes tipos de créditos, pero los más comunes son la tarjeta de crédito y la póliza de crédito.  

La póliza de crédito es la más típica de autónomos y empresas: consiste en una línea de crédito que dura un año y que es renovable (renegociando, eso sí, intereses y comisiones). 

3) ¿Cuándo pedir un crédito para autónomos? 

Los créditos para autónomos están pensados principalmente para conseguir liquidez a corto plazo. 

Por ejemplo, para la compra de mercancías o financiar a clientes. 

No son adecuados, sin embargo, para financiar activos que van a durar varios años (coches, local comercial, etc.). 

Esto es importante: porque muchos emprendedores usan los créditos para financiar ese tipo de gastos a largo plazo y, sinceramente, eso es un error.

Es un error porque al vencer la póliza, es probable que no hayas podido cubrir el gasto. Por lo que si no te renuevan el crédito… Sí, tienes un problema 😬 

Así que anota este consejo: usa pólizas de crédito para pagar cosas que luego recuperarás. 

Entre los créditos para autónomos, los más conocidos y accesibles son los del ICO. Hablemos de ellos. 

4) Los créditos ICO para autónomos: para empezar (y seguir)

Los créditos del Instituto de Crédito Oficial (ICO), una entidad estatal, forman parte de una amplia línea de financiación pública para emprendedores y empresas. 

El programa, conocido como Línea ICO Empresas y Emprendedores, incluye otras modalidades como los préstamos, el leasing y el renting que más adelante te comentamos.

¿Qué hace tan atractivos a los créditos ICO? Toma nota ✍️

  • Son más accesibles para los autónomos, especialmente en épocas de inflación o crisis, cuando es más difícil acceder al crédito privado 
  • Suelen ofrecer unos tipos de interés más bajos 
  • Los plazos de devolución son más extensos (de hasta 20 años) con periodos de carencia de hasta 3 años (el periodo de carencia es un intervalo de tiempo inicial en el que devuelves una cuota reducida o nada).
  • Se pueden destinar a diferentes necesidades: poner en marcha un negocio o financiar gastos corrientes como el pago a proveedores o la compra de mercancías

Los créditos ICO se gestionan a través de bancos privados como el Santander, CaixaBank o BBVA, por citar los más conocidos. 

Esto quiere decir que debes solicitarlos en uno de estos bancos. Puedes consultar la lista completa de entidades colaboradoras en la web del ICO. 

O seguir leyendo para descubrir más 🧐

5) Préstamos para autónomos: financiación a largo plazo 

Decíamos antes que un préstamo es una cantidad que el banco te presta de una vez. 

Nos habíamos dejado lo más importante: ¿Para qué pedirlo? 

Lo recomendable: pedir un préstamo es una opción para financiar proyectos o activos a largo plazo. 

Por ejemplo, la compra de un coche, muebles, ordenadores o maquinaria.  

Y como con los créditos, también puedes acceder a préstamos ICO para autónomos y bajo las mismas condiciones. 

6) Préstamo o crédito: ¿Cuál es la mejor opción de financiación para autónomos?  

Pues depende:

  • Si es para una cuestión más puntual, los créditos son la mejor opción. 
  • Para proyectos o inversiones a largo plazo, te recomendamos pedir un préstamo. También para problemas de liquidez permanente o estructural.

Más arriba te explicábamos la diferencia principal entre un préstamo y un crédito.

Es decir (y recapitulando):

  • El dinero del préstamo lo recibes de golpe al principio
  • El dinero del crédito lo usas a demanda en cantidades inferiores al importe total solicitado

Aquí tienes otras diferencias

  • Intereses. En el préstamo, pagas intereses por todo el capital desde el primer momento y suelen ser más altos. En el crédito solo pagas intereses por el dinero que usas.
  • Plazos de amortización (o devolución). Un préstamo tiene plazos largos, generalmente de varios años. El crédito suele tener un plazo de un año (o indefinido) y renovable.
  • Formas de devolver el dinero. En el préstamo, pagas cuotas mensuales. Y, cuando se termina, si necesitas más dinero, debes pedir un nuevo préstamo. Un crédito se suele renovar al finalizar para seguir disfrutando de él.  

7) Préstamos para nuevos autónomos sin aval… ¿Existen?

De entrada, un préstamo sin aval para un autónomo es… Una contradicción, por decirlo suavemente. 

Por norma, los bancos siempre te van a pedir avales al solicitar un préstamo o un crédito. 

Existe, ahora bien, una pequeña excepción (con letra pequeña): los microcréditos

Como su nombre indica, son créditos de importe reducido y a los que puedes acceder sin aval

Como informa el Banco de España, “la finalidad de este tipo de créditos es la puesta en marcha de un proyecto o negocio”.

De lo que ya no informa el Banco de España es de su principal contra: sus intereses, que son muy elevados ☹️ 

Por cierto, si tienes un proyecto sólido, puedes conseguir que una Sociedad de Garantía Recíproca (o SGR) te avale. 

Las SGR son entidades financieras sin ánimo de lucro que cuentan con el apoyo del Estado. 

A través de una SGR puedes acceder a créditos o préstamos bancarios. También a los del ICO, que tiene una línea exclusiva llamada ICO Garantía SGR/SAECA

Sin embargo… Que te avale una SGR no sale gratis. Y exige compromiso. 

Tienes que hacerte socio partícipe de la SGR, lo que significa comprar participaciones y cumplir con unas obligaciones. 

Pero es una opción y tienes una SGR en cada provincia de España. Al menos, para informarte 📰

8) Otras formas de financiación para autónomos: leasing y renting, factoring y confirming

No solo de créditos y préstamos vive la financiación de los autónomos (y los bancos, claro).  

Existen otras opciones como: 

  • Leasing o renting. Son contratos de financiación a largo plazo. Ideales para comprar un coche (u otro tipo de vehículo) o maquinaria. Cuando es un leasing, el banco te cede un bien (un coche, por ejemplo) a cambio del pago de unas cuotas mensuales (con opción de compra). El renting es parecido, pero sin posibilidad de compra.
  • Confirming. Es una manera de financiar el pago a tus proveedores para evitar problemas de tesorería. Es aconsejable si tienes muchos proveedores y un sistema de pago complejo.  
  • Factoring. Como en el anterior, está pensado para aliviar problemas de tesorería evitando el riesgo de impago de tus clientes. El banco adelanta ese dinero. Solo tiene sentido si trabajas para grandes empresas con plazos de pago muy largos. 

9) ¿Hay formas de conseguir financiación para autónomos con deudas?

Depende de lo que entiendas por “autónomos con deudas”. 

Si te refieres a formar parte de una lista de morosos como Asnef… Sí, es difícil conseguir financiación como préstamos o créditos. 

Aunque no imposible. El portal financiero Rankia señala que entidades de crédito online como SoftKredit o Wifi Legal sí lo hacen. 

Y otro portal financiero como HelpMyCash informa como opciones posibles los créditos rápidos y los préstamos con garantías y avales

Eso sí, a un precio elevado: la garantía puede ser tu vivienda o coche. 

Y la entidad estudiará bien el tipo de deudas, tus ingresos y tu situación laboral. 

Aclarado esto y adelantándonos el siguiente apartado: antes de pedir financiación como préstamos o créditos debes tener muy claras tus deudas. 

Entre otras cosas, porque el banco tiene mecanismos para conocerlas: uno, famoso, es la  Central de Información de Riesgos (o CIRBE)

La CIRBE es una base de datos que recoge la información de los préstamos, créditos, avales y garantías que cada banco tiene con sus clientes

Es una base pública, lo que no implica que cualquiera pueda consultarla para conocer las deudas de otros.

Pero un banco al que le solicitas un crédito o préstamo sí puede hacerlo. Y tú también. 

La CIRBE, por cierto, no es una lista de morosos. Pero puede ser igual de molesta a la hora de pedir financiación… 😏 

5 consejos útiles sobre financiación para autónomos

Antes de despedirnos, queremos obsequiarte con 5 consejos al pedir financiación para autónomos. 

Son los consejos más personales que podemos ofrecerte, ya que provienen de Juanjo Traver, economista y socio fundador de Declarando.

financiacon autonomos

Allá van: 

1. Sé honesto con el banco sobre tu situación financiera

  • Conoce todas tus deudas y verifícalas en la CIRBE antes de pedir financiación.
  • Asegúrate de no aparecer en ficheros de morosos. Resuelve cualquier deuda pendiente para mejorar tus posibilidades de obtener un préstamo o crédito.
  • Calcula tu capacidad de repago. Es decir, calcula tus cuotas mensuales de préstamos y tarjetas, y compáralas con tus ingresos. Si superan el 40 %, será difícil obtener financiación 😬

2. Evita los avales de terceros (al coste de menos financiación)

Cuando acabas de arrancar, lo más probable es que te pidan aval de otra persona. 

Además del tuyo, claro (siendo autónomo, por defecto, estás avalando con tu patrimonio). 

Cuidado con esto porque un aval es algo muy serio. Siempre que puedas evitarlo, no lo aceptes, hacer perder bienes a personas ajenas no es algo trivial. 

Es mejor reducir el importe de la financiación si con ello dejan de exigirte este aval. 

3. Mejora tu relación con los bancos

  • Mantén tus ingresos y pagos en el mismo banco para aumentar tu rentabilidad como cliente. Esto puede facilitar que luego te concedan financiación.
  • Relaciónate con varios bancos. Tener más opciones aumenta tus posibilidades de obtener financiación en mejores condiciones.
  • Solicita financiación en varios bancos y utiliza las ofertas para negociar mejores condiciones. Siempre hay margen para mejorar plazos, comisiones o tipos de interés.

4. Elige entre préstamo o crédito según la finalidad

Recuerda: 

  • Los préstamos son útiles para inversiones a largo plazo como maquinaria o vehículos.
  • Los créditos son flexibles para cubrir necesidades a corto plazo (eso sí: puede acarrear más riesgos si no los gestionas bien). 

5. Prepara un plan de negocio breve (y llévate bien con tu gestor)

Un plan de negocio conciso (menos de 5 páginas) es más efectivo. A no ser que aspires a un préstamo o crédito del ICO. 

Piensa que el analista de riesgos de un banco privado se centrará sobre todo en tu historial financiero y en tu viabilidad.

Por lo que en tu plan de negocio céntrate en explicar por qué tu negocio va a ser un éxito (no te cortes: el entusiasmo es contagioso) y qué ingresos y gastos proyectas tener.  

Mantén una buena relación con tu gestor: si este apoya tu proyecto, te ayudará a convencer al analista de riesgos. 

Resumiendo: situación financiera clara y honesta, buena relación con los bancos y tu gestor y un plan conciso y convincente. 

Como autónomo, un buen asesoramiento financiero puede ayudarte a acceder a la financiación que deseas.

¿Necesitas más ayuda? Solicita ahora una llamada gratuita con uno de nuestros mentores fiscales especializados en autónomos 😃

Javier Vivas
Autor:
Javier Vivas
Javier es periodista y redactor de contenidos. Lleva más de 7 años escribiendo sobre autónomos (facturación, impuestos, contabilidad, etc.). Le encanta leer, mantenerse informado y esas cosas. Cuando no está escribiendo o pateándose toda Palma con su hijo a cuestas, devora libros y revistas de todo tipo y sobre cualquier tema... ¡su curiosidad es infinita!