Deducciones fiscales para autónomos (o cómo ahorrar más en tus impuestos)

¿Cómo leerías el título de este artículo si en lugar de “deducciones” hubiéramos escrito “descuentos”?

Así lo verás mejor: “Descuentos fiscales para autónomos”. 

Porque en eso consiste esto de las deducciones fiscales: en aplicar descuentos en tus impuestos. 

Y con un fin muy beneficioso para ti: para pagar menos a Hacienda. 

Suena bien, ¿verdad? 

Todo lo que debes saber como autónomo lo encontrarás a continuación 👇

¿Qué son las deducciones fiscales de los autónomos?

La Agencia Tributaria define las deducciones fiscales como “cantidades que minoran la cuota a pagar por un impuesto”. 

O dicho de otra manera: son importes que se restan de un impuesto, como si fueran un “descuento”.

Cuando hablamos de deducciones fiscales y autónomos, es inevitable mencionar los gastos deducibles

Un gasto deducible es aquel que está relacionado con tu actividad profesional. Y por ese motivo Hacienda permite descontarlo de tus impuestos. 

Porque sin ese gasto, Hacienda considera que no podrías desarrollar tu actividad plenamente. 

Pero los gastos deducibles de tu actividad no comprenden todas las deducciones fiscales, aunque sí son las más golosas. 

Y es que a base de deducir tus gastos, según nuestros estudios, puedes ahorrar una media de 4.000 € al año. Que se dice pronto… 💸

Tipos de deducciones fiscales

Hacienda diferencia las deducciones fiscales en los autónomos según dos impuestos que te serán muy familiares: 

  • El impuesto sobre el valor añadido o IVA. 
  • El impuesto sobre la renta de las personas físicas o IRPF. 

En el IVA, una deducción fiscal significa que este impuesto que has pagado en tus compras lo puedes recuperar

Es lo que se conoce como IVA deducible y es lo que hace del IVA de los autónomos (y de las empresas) algo tan peculiar. 

En el IRPF, las deducciones fiscales funcionan de una manera distinta: el importe bruto (sin IVA, claro) de tus gastos se resta sobre el resultado a pagar

Y de esta manera acabas pagando menos en tu declaración de la renta

Las reducciones del IRPF

Como autónomo, lo que más te interesa son las deducciones fiscales del IVA y el IRPF. 

Porque, como veremos más adelante, es ahí donde está la clave de tu ahorro fiscal

Pero aparte de las deducciones fiscales, en el IRPF también existe otro tipo de descuento conocido como reducciones

Y estas también son importantes para ti, especialmente si eres nuevo autónomo. 

Las reducciones, al igual que sus primas hermanas las deducciones, sirven para pagar menos

Hacienda las aplica automáticamente según circunstancias profesionales y personales como las siguientes: 

  • Inicio de actividad. Cuando empiezas como autónomo, Hacienda te aplica un 20 % de descuento sobre tus beneficios, siempre y cuando hayas tenido beneficios y estos no hayan superado los 100.000 €
  • Por cuidado de hijos
  • Por edad
  • Por discapacidad
  • Por aportaciones a planes de pensiones

 

¿Por qué son importantes las deducciones fiscales para los autónomos?

Hasta ahora hemos dejado caer dos perlas que queremos retomar aquí: 

  • A base de deducir gastos, puedes ahorrar una media de 4.000 € al año
  • Las deducciones fiscales en el IVA y el IRPF son la clave de tu ahorro fiscal

deducciones fiscales para autonomos

Estas frases hablan por sí solas.

Y es que si te centras únicamente en los gastos de tu actividad, puedes conseguir pagar menos a Hacienda cada trimestre y cada año.

Cada trimestre, deduciendo el IVA de tus gastos. 

Cada año, deduciendo los gastos de tu actividad del IRPF. 

Eso sí, debes saber qué gastos puedes deducir y en qué proporción (no todos son deducibles al 100 %) y qué requisitos cumplir.

Y es que Hacienda está más interesada en que pagues. 

Y menos interesada en que pagues… menos 😒

Por lo que cuando quieres sacar partido de todas las deducciones fiscales, sus funcionarios miran con lupa hasta el último detalle o se hacen los distraídos (no esperes asesoramiento). 

Por eso es conveniente que conozcas bien tus deducciones fiscales. 

Porque si las aprovechas, pagarás menos impuestos: una media, disculpa que insistamos, de 4.000 € al año. 

Y porque si te deduces mal un gasto, puedes acabar pagando una multa de entre el 50 % y el 150 % de la cantidad deducida.

Así que presta atención, porque es ahora cuando esto de ahorrar más se pone interesante 😄

¿Cómo funcionan las deducciones en el IVA?

De entrada, puedes deducir el IVA de cualquier gasto relacionado con tu actividad. 

Debes cumplir, eso sí, estos requisitos: 

  • El gasto debe ser de uso exclusivo para tu actividad. Si lo usas también con fines privados, no puedes deducirlo, con algunas excepciones como los gastos por gasolina o los gastos de suministro (agua, luz o gas) si trabajas en casa.
  • Conservar la factura completa del gasto (una factura simplificada o ticket no cuenta, ya que no constan tus datos fiscales y el IVA puede aparecer incluido, sin desglosar)
  • Registrar la factura en tu contabilidad de autónomo, que se basa fundamentalmente en un registro de los ingresos y gastos de tu actividad

Para deducir el IVA, debes declararlo en el modelo 303, que es un modelo de declaración trimestral. 

Y el mecanismo es así de sencillo: lo que declaras en ese modelo es la diferencia del IVA de tus ventas y el IVA de tus gastos. 

Decíamos que “de entrada” puedes deducir el IVA de cualquier gasto de tu actividad porque en la práctica hay algunas limitaciones y prohibiciones.

Por ejemplo, si no ejerces una actividad relacionada con el transporte de personas o mercancías, solo puedes deducir el 50 % del IVA de la gasolina. 

Si viajas por el extranjero y compras algún bien para tu actividad, no puedes deducir el IVA de esa compra en Hacienda (tendrás que solicitar su devolución en el país donde lo hayas comprado).

Y si tu actividad está exenta de IVA, tampoco puedes deducir el IVA de tus gastos. 

Deducciones fiscales en la renta de los autónomos, ¿cómo funcionan?

Tus deducciones fiscales en la renta son de dos tipos: 

  • Las procedentes de gastos derivados de tu actividad económica
  • Las generales que, por tales, se aplican a todos los contribuyentes, sean autónomos o no

Las primeras son las que más te interesan conocer, ya que son propias de tu actividad.

Las segundas se conocen como deducciones generales y pueden variar de un año para el otro. 

Deducciones fiscales en la renta relacionadas con tu actividad 

Para poder aplicarte deducciones en la renta por gastos propios de tu actividad, debes cumplir los mismos requisitos que una deducción del IVA. 

Toma nota, porque Hacienda es muy puntillosa ✍️

  • El gasto debe ser necesario para tu actividad
  • Debe estar justificado con una factura
  • Debe estar registrado en tu contabilidad

Dicho esto, algunos gastos deducibles están limitados por ley. 

Y otros, como la cuota de autónomo o los seguros médicos, son deducibles sin factura.

Aunque en nuestra guía de gastos deducibles los encontrarás más detallados, te listamos las principales deducciones que, por tu actividad, podrías aplicarte:

  • La cuota de autónomo
  • Si trabajas en casa, la hipoteca o el alquiler, pero solo en proporción al espacio que usas para trabajar (por ejemplo, si tu despacho ocupa el 15 % de la vivienda, solo puedes deducir ese porcentaje). 
  • Los gastos por suministro como la luz, el agua o el gas, de los que solo puedes deducir el 30 % del espacio que ocupas para trabajar (siguiendo el ejemplo de antes: primero deberías calcular el 15 % del importe de la factura y de ahí puedes deducir el 30 %).
  • Impuestos municipales como el IBI y la tasa de basuras (si trabajas en casa o en un local de negocio y asumes esos impuestos) 
  • La comunidad de propietarios 
  • El teléfono e internet, pero han de ser de uso exclusivo para tu actividad (sí, tendrás que tener un contrato distinto al privado)
  • Material de oficina 
  • Bienes de inversión como ordenadores o mobiliario de oficina (su valor debe superar los 300 €)
  • Gastos de asesoría o consultoría
  • Gastos financieros (comisiones de tarjetas o intereses derivados de préstamos y créditos)
  • Dietas por desplazamiento y viajes, pero con límites: hasta 26,67 € al día (48,08 € si es en el extranjero), límite que asciende a  53,34 € al día (91,35 € en el extranjero) si te hospedas en un hotel.  
  • Gastos de representación, que no pueden superar el 1 % de tus ingresos anuales
  • Herramientas online (como softwares de facturación y contabilidad)
  • Seguros (médicos, de vida, de responsabilidad civil)
  • Si tributas por el régimen de recargo de equivalencia o tu actividad está exenta de IVA, puedes deducir el IVA de tus gastos
  • Si te dedicas al transporte de mercancías o personas o eres agente comercial colegiado, puedes deducir el 100 % de los gastos del vehículo, incluida la gasolina

Como ves, hay gastos que no son 100 % deducibles, y otros específicos de una actividad, como la gasolina. 

Los gastos de difícil justificación 

Los gastos de difícil justificación es una deducción genérica que aplica a Hacienda a los autónomos que tributan su actividad por el régimen de estimación directa simplificada

Es decir, sobre los autónomos que desarrollan una actividad profesional o artística (puedes comprobar si es tu caso si en tu alta de autónomo en Hacienda marcaste la casilla 609 del modelo 036 o 037). 

Esta deducción es del 7 % sobre tus beneficios (el resultado de restar tus ingresos y gastos). 

Y tiene un límite: el importe deducido no puede superar los 2.000 €. 

Las deducciones fiscales generales en la renta de los autónomos

Se llaman deducciones fiscales generales por un motivo obvio: son aplicables a todos los contribuyentes, con independencia de que sean empleados, autónomos, parados o estudiantes. 

Para la renta 2022 (la que se presenta en 2023), por ejemplo, las deducciones generales más importantes se aplicaban por: 

  • Invertir en empresas de nueva o reciente creación
  • Hacer donativos a asociaciones que ayudan a los más necesitados (ONG)
  • Acciones para la protección y difusión del patrimonio histórico nacional y mundial
  • Por el alquiler de la vivienda habitual (solo para alquileres con contratos firmados antes de 2015)
  • Por obras de mejora de la eficiencia energética de viviendas

Estas deducciones funcionan de la siguiente manera: el 50 % se aplica sobre lo que tienes que pagar en el tramo estatal y el otro 50 % sobre el tramo autonómico

Y es que el IRPF que pagas en tu declaración de la renta tiene un tramo autonómico, es decir, un tramo propio que depende de tu comunidad autónoma de residencia. 

A diferencia del estatal, que es igual para todos, los tramos autonómicos varían, tal y como puedes comprobar en la web de la Agencia Tributaria

Y no solo eso: las deducciones fiscales en la renta también tienen un componente autonómico. 

Es decir, que cada comunidad autónoma tiene las propias y estas (cómo no) también difieren 👇

¿Qué son las deducciones autonómicas y cómo afectan a los autónomos?

Pues eso: las comunidades autónomas aplican sus propias deducciones fiscales en la renta

Pero no son exclusivas para los autónomos, por trabajar por su cuenta: cualquier contribuyente que cumpla los requisitos se puede beneficiar. 

Estas deducciones están relacionadas con: 

  • Tu situación personal o familiar, como tener hijos menores de edad, ser familia numerosa o estar al cuidado de una persona mayor
  • La adopción de menores 
  • Inversiones no empresariales, sobre todo en tu vivienda habitual 
  • Gastos educativos de los hijos como el pago de matrículas en guarderías o la compra de libros de texto
  • Por donaciones a asociaciones no gubernamentales de distintos ámbitos (ecológico, exclusión social, actividades culturales, etc.).

Como en toda deducción fiscal, las autonómicas también deben estar limitadas y están sujetas a límites. 

En la web de la Agencia Tributaria puedes consultarlas por comunidad autónoma

Y si lo que te interesa es sacar un mayor provecto a las deducciones de tu actividad como autónomo, no dudes en ponerte en contacto con uno de nuestros asesores. 

Estaremos encantados de ayudarte con una consulta gratuita 🤗

Javier Vivas
Autor:
Javier Vivas
Javier es periodista y redactor de contenidos. Lleva más de 7 años escribiendo sobre autónomos (facturación, impuestos, contabilidad, etc.). Le encanta leer, mantenerse informado y esas cosas. Cuando no está escribiendo o pateándose toda Palma con su hijo a cuestas, devora libros y revistas de todo tipo y sobre cualquier tema... ¡su curiosidad es infinita!